Las actuaciones #ATRI no se dan en condiciones convencionales de producción de vivienda de nueva planta, por eso ya existen procesos eficientes y contrastados.
0-Preparación del soporte y de conexiones a servicios
En cuanto al soporte, encontraremos dos grandes grupos de situaciones posibles:
- Actuación sobre un tejido edificado pre-existente: Se puede tratar de una remonta o de una inserción, en cualquier caso se tendrá que hacer un estudio de las características estructurales, accesos y espacios comunes, instalaciones, etcétera, de forma que se garantice la compatibilidad y el buen funcionamiento del conjunto, con la filosofía de partida que la ampliación del techo edificado tiene que suponer una mejora integral.
- Instalación reversible sobre un espacio vacío: En el caso de las actuaciones sobre espacios en desuso se tendrá que estudiar la utilización de sistemas de fundamentación reversible, actualmente disponibles en el mercado de la prefabricación. Contamos con diferentes soluciones estructurales desmontables, como por ejemplo las vigas metálicas alveolares utilizadas pincipalmente en la estabilización de muros y taludes. Las acometidas de instalaciones serán muy similares a las que tienen carácter permanente.
1-ETAPA NEGRA: Industrialización modular con criterios ecológicos
#ATRI apuesta decididamente por la prefabricación en taller de elementos modulares. Hilando algo más fino, recomendamos el uso de la modulación estándar ISO de aproximadamente 2,5 metros de anchura, que permiten el transporte convencional por carretera. Estos módulos se pueden construir con materiales nuevos como madera o acero, pero también son compatibles con los contenedores de transporte multimoldal, permitiendo su reutilización.
Los módulos saldrán de fábrica con un nivel alto de acabados en forjados, aislamiento, paredes principales, instalaciones básicas, pero no necesariamente en tabiques ni revestimientos interiores, por ejemplo.
Los módulos tridimensionales ISO se pueden combinar, actuando también de apoyo vertical de los otros elementos, con sistemas de forjado y cierres prefabricados, lo que abre la puerta a diferentes combinaciones posibles, entre módulos tridimensionales y elementos bidimensionales.
En los casos con dificultad de acceso los sistemas modulares tridimensionales dejarán paso a los sistemas bidimensionales, industrializados de manera similar al anterior.
Tanto en el sistema mixto como en los sistemas basados en paneles bidimensionales, los elementos se preparan igualmente a taller y llegarían a la obra cortados a medida, codificados y listos para su colocación. Con este sistema se acortan los tiempos de obra de forma comparable con el sistema de módulos prefabricados tridimensionales.
Este criterio constructivo, riguroso pero abierto, puede resultar idóneo para llenar con rapidez vacíos urbanos entre medianeras y, muy especialmente, para ejecutar remontas que añaden sobrepeso a construcciones existentes. Además, su carácter de elementos fácilmente transportables tiene una doble ventaja. Por un lado, permite que la construcción pueda empezar lejos de la obra, en instalaciones centralizadas, mientras se hacen los trámites para obtener las licencias de obra o se desarrollan los trabajos de preparación del soporte y acometidas de instalaciones.
2-ETAPA GRIS: Puesta en obra
A pesar de basarse en sistemas industrializados y con posibilidad de reversibilidad, la apuesta de ATRI es hacia la calidad y la eficiencia energética, rehuyendo la exhibición de su carácter modular (por ejemplo en los casos en que se usen contenedores ISO), por el contrario, ofreciendo un repertorio de soluciones de acabados en el exterior que dialoguen con la ciudad y en el interior inspiren la domesticidad.
Para lograr esto, las fases de puesta en obra y de acabado en cada momento son fundamentales, y además son una oportunidad para la economía de las manos pequeñas.
La puesta en obra se estructura en dos momentos:
-Instalación de los elementos prefabricados sobre el soporte previamente preparado: La responsabilidad de esta tarea recae en el contratista industrial, teniendo que garantizar, como mínimo, las compatibilidades dimensionales, los sistemas de anclaje y las conexiones a los ramales principales de instalaciones.
-El acabado de la obra gris por parte de profesionales y pequeños industriales locales:El grado de acabado de esta fase tiene que dejar suficiente margen a la siguiente (la obra blanca por parte de las personas usuarias), contando con cierta flexibilidad en la definición de los límites entre fases.
3-ETAPA BLANCA: Bricolaje asistido
Los protagonistas de la última fase son los propios habitantes, asistidos por profesionales en talleres (workshops) de bricolaje. Por esta fase se contará con una carta de materiales y equipamientos (carpinterías, mobiliario cocina, armarios, grifos, alumbrado, pinturas, etcétera) posibles, de la cual se podrán escoger soluciones alternativas y que serán implementadas por ellos mismos con asistencia técnica coordinada por la dirección facultativa.
Cómo decíamos antes, el grado de implicación de esta fase puede variar de proyecto a proyecto, conservando unos mínimos de implicación por parte de los futuros habitantes.